CINE | AMY

Por Luis Trelles

Muerta a los 27 años de edad, tras alcanzar la fama no solo en Gran Bretaña, su país de origen, sino internacionalmente como lo demuestran sus apariciones en festivales como el de Roterdam, sus entrevistas en los medios masivos norteamericanos y la obtención de los codiciados Grammy, Amy Winehouse fue una vocalista y autora de canciones, que se inspiraban muy a menudo en los sucesos de su vida y en sus amores.

Promiscua según se sostiene en el documental del mismo nombre que la cantante, Amy, que se estrena entre nosotros, esta personalidad fue adicta desde muy temprano al alcohol y más tarde a las sustancias controladas: mariguana, cocaína, crack y heroína. Amy Winehouse fue una figura pública patética. En ella se aunaban los mayores triunfos y la fortuna con ellos asociada y las desventuras personales en las cuales figuraron prominentemente el que fuera su esposo, Blake Fielder y su propio padre, Mitch Winehouse.

Este documental la revela de manera muy creativa a base de múltiples testimonios que ofrecen los muchos entrevistados que en distancias capacidades: miembros de su familia judía, amigos, promotores y gerentes de su carrera, personalidades asociadas al mundo de los discos y las grabaciones y músicos que trabajaron junto a ella.

Esos testimonios se combinan con un montaje fluido de abundante pietaje entresacado de las más diversas fuentes. Ellos nos transmiten con el poder que tienen las imágenes, la historia de un joven talento en ascenso en el mundo de los discos, los conciertos masivos y la canción popular y también de una asociación que resultó letal con el hombre que la apasionaba y con el que compartía los mismos excesos. Ello produjo una decadencia temprana que no pudo evitar el ingreso frecuente en centros de rehabilitación.

Amy es un documental dirigido por Asif Kapadia que con una duración de poco más de dos horas logra transmitir a los espectadores a través de visuales impactantes y de una banda sonora muy rica en las canciones de Winehouse, los altibajos de una vida que concluyó muy temprano y tras las cuál es posible detectar ese denominador común en las figuras triunfantes del mundo del espectáculo: el de los que se aprovechan de las mismas, que comparten una misma responsabilidad al momento de evaluar sus muertes tempranas.