Por Luis Trelles
Última película del director español, Pedro Almodóvar, figura de sobre conocida en Puerto Rico, Los amantes pasajeros representa dentro de la obra fílmica en progreso del realizador manchego una vuelta a su cine inicial, aquél con el que comenzó su carrera fílmica a fines de la década de los setenta del siglo pasado, tras la muerte de Franco y la apertura que se produjo en España tras el cambio de régimen. Se dio entonces el “destape” y la “movida madrileña” significándose con esos términos un tipo de filme abiertamente sexual y contrario a todo lo que había prevalecido hasta entonces. pertenecen a ese momento cintas de Almodóvar como Pepi, Luci y Bom y otras chicas del montón y ¿Qué he hecho yo para merecer ésto? Estableció así el manchego no solo una temática preferida sino también contó con un elenco predilecto del que formaron parte figuras protagónicas (Carmen Maura) como personalidades de apoyo (Chus Lampreave). Trabajó después el melodrama (La flor de mi secreto) y últimamente nos ofreció en La piel que habito un tipo de cine escalofriante, de fría belleza formal.
Los amantes pasajeros es totalmente diferente a esas obras recientes. Es una comedia sexual cuya acción sucede en buena medida dentro de los estrechos confines de la clase ejecutiva de un avión que, partiendo del aeropuerto de Barajas, se encamina a México.
Sus pasajeros, unos seis, es un grupo pequeño en número pero muy diverso en su composición. Incluye desde una chica deseosa de perder su virginidad que también es “medium” hasta una estrella de espectáculos eróticos, un agente de seguridad que no es tal sino un matón profesional, un banquero que huye tras cometer numerosos desfalcos y una pareja de recién casados a más de un actor profesional.
El grupo de asistentes de vuelo, todos homosexuales, y dos pilotos completan el grupo de personajes. Se dedican a conversar de todo tipo de experiencias sexuales y buscan entretener a los pasajeros, ya que están amenazados de un difícil aterrizaje.
A mitad aproximadamente del tiempo de duración de la cinta se hace evidente a los pasajeros la grave crisis que confrontan pero ese cambio de tono de la película se materializa tarde, muy tarde, para salvar al filme de su insustancialidad.
Los amantes pasajeros es una cinta menor y decepcionante en la filmografía de Almodóvar. El filme deja mucho que desear como ofrecimiento creativo pero abunda tanto e lo muy discursivo como en constantes referencias sexuales.