Por Luis Trelles
Hay películas cuyos temas coinciden con sucesos de magnitud internacional que ocurren al mismo tiempo que el estreno de las mismas. En el pasado un caso famoso lo fue el de la cinta Casablanca, exhibida en el momento en que se producía la invasión de África del Norte durante la segunda guerra mundial.
Hoy Non-Stop, thriller de acción casi continua, se estrena mientras el mundo está atento a la desaparición del avión con doscientos y tantos pasajeros a bordo que parece fue objeto de una acción terrorista.
El parecido de Non-Stop con el evento antes mencionado descansa en que el avión en que sucede casi toda la trama de la película está a punto de sufrir las terribles consecuencias de un ataque terrorista, consistente en la amenaza que se le hace a un alguacil federal que viaja en dicho aeroplano con el fin de evitar lo que precisamente sucede. Alguien en el avión le envía a dicho agente un texto en el que le informa que, a menos que se deposite una suma multimillonaria en una cuenta cuya numeración se le ofrece, perecerá cada cierto número de minutos uno de los pasajeros.
El agente trabaja entonces contra el tiempo tratando de descubrir al terrorista. Encuentra cooperación para sus gestiones tanto en una de las pasajeras como en una de las azafatas.
El argumento se complica aún más al darse cuenta el alguacil que el número de la cuenta en la que se debe hacer el depósito está a su nombre, lo que lo incrimina.
Esta trama, extremadamente improbable, ha sido dirigida por Jaume Collet-Serra, realizador español que ha realizado anteriormente House of Wax (2005) y Orphan (2009), con suma pericia técnica y cuenta para el rol central con el actor irlandés, Liam Neeson. Este con su recio aspecto, su formidable voz y sus gestos que revelan a un hombre atormentado tanto por la desgracia personal ocurrida en su vida como por su afición a la bebida, hace muy creíble su personaje, pese a tanto incidente increíble en que abunda el filme.
Secunda a Neeson, tres actrices, una de ellas conocida del público por sus papeles anteriores- Julianne Moore- que se hace cargo del rol de la pasajera que lo ayuda. Otra Michelle Dockery- se ha dado a conocer en la serie televisiva inglesa, Downton Abbey. La tercera, en cambio, que asume un rol insignificante en la cinta, es Lupita Myong’o, receptora del premio que acaba de concederle la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas como la mejor actriz secundaria del año 2013 por su participación en el filme titulado 12 Years a Slave y, por supuesto, su presencia en Non-Stop es anterior a su recepción del “Oscar”.
Película que satisfacerá a los amantes de los filmes de tensión, Non-Stop ha recibido la clasificación de A-3, para mayores, de parte de la clasificación católica y de PG-13, se advierte con insistencia a padres y guardianes que algún material de esta cinta podría resultar impropio para menores de 13 años, de la clasificación voluntaria de la industria.