Por: Daliana Rosario
Es la música que más se escucha en la época navideña y la que nos identifica como puertorriqueños. Actualmente, la misma música que promueve nuestras raíces y nos remonta a la época del jíbaro campesino en las montañas de nuestro Puerto Rico. Aunque se ha visto afectada los últimos años y de por si es ignorada la mayor parte del año por los medios de comunicación masiva, la música típica campesina ha logrado reivindicarse con los años y asegurar su lugar en la cultura popular puertorriqueña.
La música típica campesina se compone mayormente de los géneros aguinaldo, danza y el seis. Estos géneros se distinguen de los otros géneros típicos, tales como la bomba y la plena, mayormente por sus métricas hexasílabas y octosílabas. También se diferencian por sus instrumentos mayormente de cuerdas, tales como el cuatro y la guitarra. Gracias a la enseñanza en la clase de español en las escuelas de Puerto Rico y los maestros de este género que se han dedicado a proliferar el amor por la música nacional enseñándoles a los niños, la música campesina ha continuado vigente en la cultura puertorriqueña. Las escuelas de Bellas Artes y los centros culturales, como la fundación Paquito López Cruz, se han encargado de continuar transmitiendo y promoviendo el desarrollo de esta música entre los más jóvenes.
Aunque suele ser más escuchada durante la época navideña, se escucha durante todo el año gracias a las fiestas patronales y a los concursos de trovadores. Estos eventos también auspician el gusto por esta música entre los puertorriqueños. Estas canciones aunque toma temas patrióticos, a su vez tocan muchos otros temas como el amor, el humor, lo cotidiano y la religión.
A pesar de ser uno de los pilares de la cultura puertorriqueña, la música típica campesina ha sufrido mucho para permanecer vigente en el mercado de música local. En entrevistas separadas el músico Juan Carlos “Kasho” Montalvo y el productor Andrés “Cucho” Pérez señalaron que uno de los mayores impedimentos de la comercialización de la música puertorriqueña ha sido la falta de puertorriqueños en la administración de los medios de comunicación locales.
“Los medios de comunicación de Puerto Rico han subestimado la música típica campesina.”, aseguro Juan Carlos “Kasho” Montalvo, músico y coproductor del programa Cantapueblo. Montalvo denunció que el mayor problema para la difusión de la música típica campesina es que la mayor parte de los medios de comunicación de Puerto Rico son dirigidos por empresarios extranjeros y su enfoque no está dirigido a promover la música típica autóctona. A su vez también señaló la falta del auspicio de los cantantes puertorriqueños de talla internacional, quienes no se aventuran a promocionar y producir las canciones de este género.
Otro gran problema que enfrentó la música típica puertorriqueña estos últimos cuatro años fue la legislación 189 del año 2011. La misma logró eximir a los municipios de la obligación de invertir un 30 por ciento o 10,000 en música autóctona puertorriqueña utilizando la premisa de que esta tarifa no se ajusta a la realidad social y a la preferencia musical que se vive en Puerto Rico. La aprovación de esta legislación provocó un gran problema para la promoción del género, reduciendo su posibilidad, y para los trovadores en Puerto Rico, pues su mayor fuente de ingreso se vio disminuida drásticamente.
“Los intereses económicos han aplastado la cultura.”, afirmo Andrés “Cucho” Pérez, productor del programa Alborada, quien a su vez señalo que el gobierno debería fomentar mas la cultura ya que esta sensibiliza al pueblo. Pérez también denunció otros recortes del gobierno en otras áreas de las bellas artes, como en el desarrollo de programas que fomentan la danza y en las escuelas que fomentan las artes plásticas.
A pesar de vivir una de sus crisis más difíciles en años, los productores y artistas de la música típica campesina han encontrado una salida a tan difícil panorama. Gracias a las nuevas tecnologías de grabación, la producción de un disco es mucho más sencilla y económica. Ante este fenómeno, el productor Kasho Montalvo señaló que este fenómeno paradójico ha ayudado mucho a la industria de la música típica campesina y que este año se han producido cinco grabaciones.
Aunque se encuentre como un tipo de música clandestina, la esperanza de su resurgir no se pierde al fomentar el desarrollo de esta música en las escuelas y entre los más pequeños. La cultura debe ser llevada de generación en generación para no perder lo más puro y esencial que nos queda de nuestros orígenes y que remarca nuestra historia: la música.
Nota: Quiero agradecer al productor Andrés “Cucho” Pérez y al productor Juan Carlos “Kasho” Montalvo por su disposición y guía a través de la búsqueda de información del tema.
Hermosa música que debe preservarse y difundirse más. Necesitamos que Radio Universidad continúe promoviéndola. ¡Adelante!
Es la unica musica que nos devuelve a otros tiempos donde no habian tantas necedades musicales. Como el bolero nos une a otras culturas hispanas, la musica jibara promueve nuestras raices verdaderas en estos tiempos de desintegracion cultural y politica. Adelante, Sres. Perez, Montalvo y demas, trabajen con todos los jovenes que de buena voluntad son receptivos a preservar este legado.